EL MURO DEL ESCRITOR
Expresa tus emociones
domingo 03 de noviembre del 2024 19:47 semana 44
ÃNDICE TEMAS
-REFRANES-
-PROVERBIOS-
¿Cómo os va de amores?: como a mayo sus flores; si a él le va bien, a mi también.
Abril tronado, viene buen verano.
Abril, si bueno al principio, malo al fin.
Abriles y yernos poco hay buenos.
Agua de mayo, no cala el sayo.
Boñiga de abril, tira manchas mil.
Calenturas de mayo, salud para todo el año.
Cuando junio llega, busca la hoz y limpia la era.
El mes de junio, la caña en el puño.
El mes de mayo es el más largo que tiene el año.
El que en abril riega, en mayo siega.
En Abril mucho y poco venir.
En abril, la flor empieza a salir.
En abril, no quites fil.
En marzo, si cortas un cardo, nacerte han cuatro; y en abril, si cortas cuatro, nacerte ha mil.
Enero las quita el sebo, febrero las descoyunta, ellas mueren en abril, y mayo lleva la culpa.
Flores en mayo, tarde o temprano hallo.
Hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo.
La bellota que no se ve en mayo, no se ve en todo el año.
Llueva abril y mayo aunque no llueva en todo el año.
No hay mayor pena que perder a una mujer buena.
Parte su tiempo abril entre llorar y reír.
Que me siembre es en marzo, que me siembres en abril, hasta mayo no he de salir.
Quema más el sol de abril que el de todo el verano.
San Juanada venida, primavera ida.
San Marcos, rey de los charcos.
Si nieva por Santa Engracia, la viña desgracia.
Si no hubiera abril, no habría año vil.
Tiene mayo la llave del año.
Agosto, frio en el rostro.
El sol de agosto cría aceite y mosto.
El verano en la montaña, empieza en Santiago, y acaba en Santa Ana.
En agosto, bulle el mar y hierve el mosto.
En agosto, trilla el perezoso.
En julio beber y sudar, y el freso en balde buscar.
Junio es todo día: los viejos y achacosos tienen más vida.
Noche de San Juan, noches de enramas, en que los mozos rondan las enamoradas.
Por San Juan, los días empiezan a acortar.
Por Santa Magdalena, la avellana está llena.
Por septiembre, calabazas, aunque no siempre.
Primer día de agosto, primer día de invierno.
Quien en agosto ara, su riqueza prepara.
Septiembre, en fin de mes, el calor vuelve otra vez.
Si en julio vienen solanos, se va el fruto de las manos.
Si septiembre no tiene fruta, agosto tuvo la culpa.
Siete agostos, siete rostros.
San Joaquín y Santa Ana pintan la uva y al mes de agosto ya esta madura.
Agosto, mes de los gatos.
Quien no come por San Juan (24 de junio), o es loco, o no tiene pan.
Entre Santa Ana y Santa Magdalena no tengas la parva en la era.
En agosto, aunque sea poco, quien no goza de él está loco.
Venga junio fresco, Carmen claro y Santiago abrasado.
Para fines de este mes (agosto), el grano en tu casa ten.
Agosto esta reñido con Baco (dios del vino) y Cupido (dios del amor). Agosto y septiembre no duran siempre. En julio mi trigo, y en agosto el de mi amigo. Junio, Julio y Agosto ni mujeres ni coles ni mosto. En julio: beber, sudar y en el balde el fresco buscar. Por Septiembre, come y vende; pero no sea tanto tu comer, que no tengas que vender. Pollo de julio, o le duele la cabeza, o le duele el culo. A quien no tiene labrado, agosto se le hace mayo. San Pedro lluvioso (29 de junio) 30 días peligroso. San Joaquín y Santa Ana pintan la uva y al mes de agosto ya está madura. Antes de noviembre, tu viña sin fruto quede. Del veinte de noviembre en adelante, el invierno es constante. El vareo de San Andrés mucha aceituna deja caer. En diciembre diente con diente. En diciembre no hay valiente que no tiemble. En diciembre, frío y calor en el estío. En diciembre, hielos y nieves, si quieres un buen año al que viene. En noviembre haz la matanza y llena la panza. En pasando noviembre, quien no sembró que no siembre. Noviembre caliente, mayo helado Noviembre es de estío la puerta del frío. Noviembre, si las flores dan, recoge el azafrán. Octubre echa pan y cubre. Por los santos, nieve en los cantos. Por San Andrés, mosto el vino es. Por San Miguel, gran calor será de mucho valor. Quien cava en noviembre, tiempo pierde. Sembrar en noviembre y barbechar en diciembre. Si en noviembre oyes que truena, la siguiente cosecha será buena. Por todos los Santos, hielo en lo alto; por San Andrés (30 de noviembre), hielo en los pies. En diciembre por sol que haga no dejes tu capa en casa. Por San Lucas, bien saben las uvas. Si en noviembre oyes que truena, la siguiente cosecha será buena. En noviembre leña y duerme. Durante noviembre corre el lobo y el verano. Por Santa Lucia, acorta la noche y alarga el día. Por diciembre el trueno, anuncia año bueno. Por San Andrés, nevaditas tres. Por San Miguel primero la nuez, la castaña después. En diciembre, se hielan las cañas y se asan las castañas. Diciembre es del año el mes más anciano. El veranillo por san Martín ha de venir. Si a tu marido quieres bien, dale coles por San Andrés ; y si lo quieres mal, dáselas por San Juan. En noviembre el frío vuelve. Por Todos los Santos, campos verdes y montes blancos. Septiembre benigno, octubre florido. Octubre (o Noviembre) lluvioso, año copioso. No te fíes de la muchacha de la taberna ni del cielo estrellado de diciembre. Por Santa Catalina mata la cochina, por San Andrés, mata tu res; y si no tienes que matar, mata a tu mujer. Por Santa Catalina, la nieve se avecina. En diciembre, siete galgos a una liebre; y en mayo setenta liebres a un galgo. Entrado noviembre, quien no sembró, que no siembre. En diciembre, leña y duerme. Por San Miguel los higos son miel. Noviembre tronado, malo para el pastor, y peor para el ganado. No hay en diciembre valiente que no tiemble. Llegado San Mateo siembra el tonto y el cuerdo. La madera de enero no pongas al humero. Marzo engañador, un día malo y otro peor. Si hiela por San Blas, 30 días más. El calor de marzo, temprano es para el campo. En febrero, mes cebadero, y cabrito en caldero. Lluvia y sol, tiempo de marzo. En enero flores, en mayo dolores. Diciembre nevado, para el trigo buen año. Por San Vicente, helada o corriente. En enero no seas tempranero. En enero buen puchero. Marzo en lluvias, buen año. Si hiela bien por enero, mucho llueve por febrero. Enero frío y sereno, inaugura un año nuevo. Tu viña preciada, entrando marzo labrada. En las frías noches de diciembre, si ves lucir la luna blanca, echa en la cama cobertor y manta. Enero y febrero lluviosos, marzo nevoso; Hacen un año hermoso. A 15 de marzo da el sol en la umbría y canta la golondrina. Besome el colmenero y a miel me supo el beso. Las berzas de enero, escurren el puchero. Por enero, berros come el caballero. Días que pasan de enero, ajos que pierde el ajero. En enero se llena el agua en el puchero. El almendro de enero no llega al cesto. En agosto y en enero, no tomes el sol sin sombrero. Que por arriba que por abajo, la cuaresma siempre cae en marzo. La flor de enero, no llega al frutero. Febrero es loco y marzo no poco. De marzo a la mitad, la golondrina viene y el tordo se va. En enero abre tu granero. En febrero, pon obrero, mejor a finales que a primeros. Por San Antón, no hay niebla que llegue a las dos. A nadie debe extrañar que en marzo empiece a tronar. Por San Antón, echa cueros el lechón. Joven madrugador, viejo trasnochador. La juventud es el único defecto que se cura con la edad. El amor majestuoso, hace al mozo reverencioso. La edad madura es aquella en la que todavía se es joven, pero con mucho más esfuerzo. El joven conoce las reglas pero el viejo las excepciones. Cuando comienzan las uvas a madurar, comienzan las mozas a bailar. El que de joven no trabaja, de viejo duerme en paja. Quien no estudia cuando es joven, lamentará cuando sea viejo el tiempo perdido. El joven para obrar y el viejo para aconsejar. San Juan de los cuidados, cuando los mozos dejan a sus amos, y ellos toman nuevos criados. En julio, ¿dónde anda el mozo? Pues va de la acequia al pozo. Del joven voy, del viejo vengo. El que de joven corre, de viejo trota. Joven es quien está sano, aunque tenga ochenta años, y viejo doliente, aunque tenga veinte. El joven se hincha para vivir y el viejo para morir. Desconfía del médico joven y del barbero viejo. Vejez y mala salud reflejan las faltas de la juventud. Ni mozo dormidor, ni gato maullador. Ni abril sin flores, ni juventud sin amores. Buena moza y a mí me la dan...tran pa lan tran. Camina como viejo y llegaras como joven. El que fue monaguillo y después abad, sabe lo que hacen los mozos tras el altar. Joven intrépido no deja memoria. La juventud del viejo esta en el bolsillo. El que de joven no trota, de viejo galopa. Joven y peluquero, !pies para qué os quiero! A la vejez y a la juventud, espera el ataúd. Si cultivas tu talento cuando joven, cuando viejo vendrá tiempo que te alegres con extremo, mas si tratas con desprecio tu fortuna, cuando viejo serás necio y enfadoso. Si el mozo supiera y el viejo pudiera, ¿qué se les resistiera?. Los novios son como los mozos, se van unos y vienen otros. Dando tiempo al tiempo el mozo llega a viejo. Cuando joven de ilusiones, cuando viejo de recuerdos. Hombre mayor, mujer joven igual a familia numerosa. Mujer mayor, hombre joven, tontos los dos. Buen porte y buenos modales abren puertas principales. Siempre hay falsía en la mucha cortesía. En la mesa y en el juego se conoce al caballero. Buenas palabras y buenos modales todas las puertas abren. La buena educación conviene para usarla con quien la tiene. Cortesía y bien hablar cien puertas nos abrirán. Cortesía de boca, gana mucho a poca costa. Costumbres y dineros hacen hijos caballeros. Cortesía de sombrero, hace amistades y no cuesta dinero. El exceso de cortesía es descortesía. Buenas costumbres y dineros hacen de los hijos caballeros. Costumbres de mal maestro sacan hijo siniestro. Con buenas palabras y mejores hechos conquistarás el mundo entero. Sigue un buen sendero y serás un caballero. Cortesía de palabra, o conquista o empalaga. Cortesía de boca, mucho consigue y nada cuesta. Al que le barren los pies suele casarse con viuda. La casta Susana, enterró a tres maridos y aun le quedan ganas. Bueno es ser casado, si no tuviese cuidado. Entre bueyes no hay cornadas. Entre marido y mujer, nadie se debe meter. Esposa y moza, vida sabrosa. Mi marido va a la mar, chirlos mirlos va a buscar. En la casa, el hombre reina, y la mujer gobierna. A la aguja, buen hilo, y a la mujer, buen marido. Amor con casada, vida arriesgada. El marido celoso nunca tiene reposo. El que de mozo no corre su caballo, lo corre de casado. A mujer casada y casta, con el marido le basta. El mejor marido, el que más ha corrido. No te metas en pleito de marido y mujer, porque se arropan con la misma sabana. Marido rico y necio, no tiene precio. Ganan buenos para ruines herederos. A donde acaba el novio, empieza el marido. La mujer con su marido, en el campo tiene abrigo. En casa del gaitero, todos son danzantes. La mujer lo hace, y el marido no lo sabe. Marido celoso, no tiene reposo. A la sombra de un hilo, se la pega una mujer a su marido. Al viejo recién casado, rechazarle por finado. Maridos que lejos se ausentan, cornamentan. A la mujer casada y casta, con el marido le basta. La mujer que hace burla de su marido, ni tiene amor ni tiene amigo. Casado pero no capado. Quien su marido tiene en tierra ajena, muerto esta y vivo le espera. En el marido, prudencia; en la mujer, paciencia. Si quieres ver a tu marido gordito, después de la sopa dale un traguito. Casado por amores, casado por dolores. Celoso es mi marido y yo me río, porque cuando él se va, yo ya he venido. Si a tu marido quieres matar, dale caracoles en el mes de San Juan. Madre holgazana saca hija cortesana. Casado gordo y cura delgado no cumplen con su estado. La que no tiene otra cosa, con su marido se acuesta. Casado a los cincuenta, no llegarás a los sesenta. El diablo y el marido no tienen cuando. Amor con casada, solo de pasada. Marido muerto, otro al puesto. Una buena cocinera es lo que marido espera. Casado delgado y fraile tripón, ambos cumplen su obligación. Gotera en el techo y mujer pendenciera al marido de su casa echan fuera. Casaras y amansaras. Vieja verde caprichosa, ni fue buena madre ni buena esposa. Fondo salido, novio perdido o solicito marido. Mujer compuesta tira el marido de otra puesta. La mejor suegra, vestida de negro. Si a tu marido quieres bien, dale coles por San Andrés (30 de noviembre) ; y si lo quieres mal, dáselas por San Juan (24 de junio). Cura flaco y marido barrigón, ninguno cumple su función. Entre marido y mujer, nadie se debe meter. ¿Quieres ver a tu marido muerto? Dale berzas en agosto. Dame Dios marido rico, aunque sea un borrico. La rica en su desposado, lleva marido y criado. Casarse esta bien, no casarse esta mejor. La mujer debe gobernar la casa, y el marido la caja. Al marido, amarle como amigo, y temerle como enemigo. A los veinte de edad valiente, a los treinta casado, y a los cuarenta rico; si este dicho no se cumple, este gallo clavó el pico. Burlas pesadas, ni para viejas ni para casadas. La mujer compuesta, quita el marido de otra puerta. Madre, marido quiero, que dormir sola me da miedo. El amor de la mujer, en la ropa del marido se echa a ver. Casado pero no capado. Ni gazpacho añadido, ni mujer de otro marido. Casar y descasar, muy despacio se ha de pensar. Casados que no se besan no se tienen voluntad. A más doctores, más dolores. Guagua que no llora, no mama. Más vale el placer que dura un momento, que el dolor que dura una vida. El buen libro de las penas es alivio. Andar como alma en pena. El que tiene las lágrimas hondas, que empiece llorar temprano. Cuéntale tus penas a quien las pueda remediar. La mujer llora antes del matrimonio, el hombre después. Prefiero frijoles con amor que gallina con dolor. El vino exalta la fantasía, hace lucida la memoria, aumenta la alegría, alivia los dolores, destruye la melancolía. Hombre anciano, cuando muere poco ha llorado. La mucha alegría y la mucha tristeza, muerte acarrean. Para consolar tus penas, mira las ajenas. La viuda rica, con un ojo llora y con el otro repica. Comparte los sentimientos. Si las vides lloran, debemos beber sus lágrimas. El que se ha quemado con leche, ve la vaca y llora. Al triste, el puñado de trigo se le vuelve alpiste. Cantando y cantando, las penas se van aliviando. La zarza da el fruto espinando y el ruin llorando. Rubias y morenas, sacan a un hombre de penas. Camisa y toca negra, no sacan ánima de pena. Ruego a Dios si te casares, que llorando te descasen. Llorar con un ojo y reír con el otro. Tienes en casa al muerto y vas a llorar el ajeno. Tiempo pasado, traído a la memoria, da más pena que gloria. Si quieres que la gente se ría, cuenta tus penas Maria. Repara en la casa ajena, y hallaras chica tu pena. Mal habiendo y bien esperando, morirme he triste y no se cuándo. Al heredar, con un ojo reír y con el otro llorar. Alegría y tristeza muerte acarrean. Quien empieza ganando, acaba llorando. Quien tiene hijo en tierra ajena, muerto le llora, y vivo le espera hasta que llega la triste nueva. Cada quien se busca su cebolla para llorar. Cuídate mucho de hacer llorar a una mujer, pues Dios cuenta sus lágrimas. Tiempo pasado, con pena recordado. Un alma sola, ni canta ni llora. Quien en tierra ajena muere, doblada pena tiene. Hay alegrías sosas y tristezas sabrosas. Cuando el alma llora las palabras no nacen. Llora, necio, llora tus perdidas horas. ¡Oh, falso amor, pocas veces das placer y muchas dolor! Cuando la mula ríe, el asno llora. No todos lloramos el mismo día. En las penas y afanes consulta los refranes. A cualquier dolor, paciencia es lo mejor. Si el muerto volviera a vivir, de pena se volvería a morir. Vete a casa ajena y vivirás con pena. La buena lectura, alivia la tristura. El que canta por la mañana, llora por la tarde. Es triste amar sin ser amado, pero es más triste dormir sin haber cenado. Tiempo perdido, los santos lo lloran. Lo que deprisa se hace, despacio se llora. Reniego de señora que todo lo llora. Beber por jarra penada, no me agrada. Todos llorando nacieron, y nadie muere riendo. No hay mayor pena que perder a una mujer buena. Cantando se van las penas. Cuando una mujer llora, está poniendo trampas con sus lágrimas. El fracaso podrá ser algo doloroso por impedirnos alcanzar nuestro objetivo, pero la belleza está en el camino. Más vale la pena en el rostro que la mancha en el corazón. Más vale pan con amor, que gallina con dolor. Llorara la madre al hijo, más que la nieve al granizo. Donde no hubo dolor, no hay caridad ni amor. Hijos chicos, chicos dolores; hijos mayores, grandes dolores. Uno a meter y otro a sacar, el primero ha de llorar. Es mejor callar que con tontos hablar. Es mejor tres hombres corrientes que uno sabio. Más vale poco y bien arado, que no mucho y arañado. Calidad es mejor que cantidad, pero siempre sucede que la mayor parte, vence a la mejor. Más vale tierra que arena. Más vale querer a un perro y no a una ingrata mujer. Hay veces que vale más ser gallina que gallo. La que por la calle pasa, es mejor que la de mi casa. Fea con gracia, mejor que necia y guapa. Más vale callar, que con borrico hablar. Zapato roto o sano, Más vale en el pie que en la mano. Más vale poco, que nada. Más vale la seguridad, que la policía. Más vale morir honrado, que vivir deshonrado. Más vale oler a asno, que a muerto. Más vale buena muerte, que mala vida. Es mejor encender una cerilla que maldecir la oscuridad. Es mejor que una piedra en el ojo y una mordida de puerco en la cara. Más vale sutil volátil en la región metacarpiano, que la segunda potencia de diez merodeando por las regiones etéreas. Más vale un sabio vivo, que un muerto en su casa. Más vale gordo que de risa, que flaco que de lastima. Más vale morir de risa, que de ictericia. Más vale tarde, que nunca. Más vale un buen morir, que un mal vivir. Más vale hombre feo con buen arreo, que mozo bonito y sin un pito. Más vale llorar que aguantar. Más vale perder un minuto en la vida, que la vida en un minuto. Es mejor no jugárselo todo a una sola carta. Más vale perro bravo, que burro mañoso. Más vale maña, que fuerza. Más vale paso que dure, que trote que canse. Es mejor ser pecador que santo falso. Más vale el placer que dura un momento, que el dolor que dura una vida. Más vale reinar en el infierno que servir en el cielo. Más vale pillar a un lobo en un rebaño que la clara conversión de San Pablo. Buena es la pelea ganada, pero es mejor la evitada. Más vale mala suerte, que muerte: la muerte no tiene remedio; la mala suerte la cambia el tiempo. Por enero vale más una gorra que un sombrero. Más vale pan duro que hambre puro. Más vale honra sin barcos, que barco sin honra. Ida por ida, ir por ir, Más vale a la taberna que a la botica. Más vale pájaro en mano, que cien volando. Más vale sudar, que toser y tiritar. Más vale un "toma", que dos "te daré". Romperse el brial, Más vale bien que mal. Más vale la pena en el rostro que la mancha en el corazón. No hay tal saber como tonto parecer y no lo ser. Más vale tuerta, que muerta. Más vale llegar a tiempo, que rondar un año. Más vale lo poco mucho que lo mucho y poco. Vale más tener que no desear. Más vale solo, que mal acompañado. Más vale una mala boda, que un buen entierro. Mejor que decir es hacer y mejor que prometer es realizar. Es mejor un buen rumor que una mala noticia. Si la perra es bola, es mejor para el perro. Más vale un remiendo feo, que un agujero hermoso. Una gota de sangre vale más que cien litros de amor. Más vale muerte callada, que desventura publicada. Cuando hables, procura que tus palabras sean mejor que el silencio. Más vale gotera que chorrera. Un buen plan al que se llega pronto y se aplica vigorosamente es mejor que un plan perfecto al que se llega tarde y se ejecuta mal. Más vale cobarde vivo, que valiente muerto. Vale más saber que tener. Más vale prevenir, que curar. Más vale fortuna en tierra, que bonanza por la mar. Rico es el que nada desea y el que nada debe. Dinero en la bolsa, hasta que no se gasta no se goza. Cortesía de sombrero, hace amistades y no cuesta dinero. Nunca tiene razón quien no tiene dinero. Abogado de ricos, mal de pobres. Prefiero deber dinero que no favores. Mal de rico, poco daño y mucho trapico. El dinero rueda y a veces vuelve, pero la vida no retoña. Las frutas por la mañana son oro, al mediodía plata y por la noche matan. Dinero ten, y a todo parecerá bien. Golpe de cobre, nunca mato hombre. Del ocio nace el feo negocio. Cuando carga de oro el asno lleva, sube al azotea. De cola de perro y llanto de mujer, la mitad has de creer. De dinero y santidad, la mitad de la mitad. Los dineros del sacristán, cantando vienen, cantando se van. La salud es un tesoro, de más quilates que el oro. Marido rico y necio, no tiene precio. La mayor y más merecida riqueza es la sabiduría. Dinero mal prestado, en el lomo de un venado. Más vale sabio que rico. Echa vino tabernero, que no tengo dinero pero sí buena mujer. El día que el pobre come merluza, esta malo el pobre o la merluza. A dineros pagados, brazos cruzados. Si se desigualó el sembrado, por San Isidro estará igualado. Acomodarse con la pobreza es ser rico. Se es pobre, no por tener poco, sino por desear mucho. Dichosos son los pobres. Quien dineros tiene hace lo que quiere. El que trabaja mucho no tiene tiempo para ganar dinero. El dinero no da la felicidad, pero es lo que más se acerca a ella. Suegra y sin dinero, al brasero. No es pobre el que poco tiene, pero si lo es el que vive con gran avidez. Eres guapo, joven y con dinero ¿Qué más quieres, Baldomero? El dinero del juego muchos lo tienen, pero pocos lo retienen. Hijo de gran ladrón, gran señorón. A dinero en mano, el monte se hace llano. Quien cuida la peseta nunca le falta un duro. Cuando prestes dinero, se prudente, que hay quien suele pagar con un valiente. Antes mujer de un pobre, que manceba de un conde. Hay tres cosas que no se pueden ocultar: el humo, el amor y el dinero. Tesoro y pecado nunca están bien enterrados. Doctor que cura a sus enfermos no hace carrera ni dineros. Casamiento de pobres: fabrica de limosneros. El pobre no tiene consuelo ni con la subida del sueldo. Más vale libertad con pobreza, que prisión con riquezas. El sueño es alimento de los pobres. Quien convida al cantinero o esta borracho o no tiene dinero. Al hombre pobre no le salen ladrones. Dineros me de Dios; que con mi poco saber me aviare yo. Nadie es monedita de oro para caerle bien a todo el mundo. Bien me quieres, bien te quiero, no me toques el dinero. La limpieza es el lujo del pobre. Tres cosas son necesarias para la vida: salud, dinero y amor. Dame consejos sanos y dinero para ejecutarlos. El cura, cuando muere un rico, mata un buen cochino. El dinero corrompe al hombre. Más vale dejar en muerte a un pillo un duro, que pedir en vida una peseta a un hombre de bien. Hay gente tan pobre, que solo tiene dinero. Ninguno tan pobre muere que más no naciese. Por guita baila el mono. Con plata nada falta. Mucho dinero y poca educación, es la peor combinación. Cuando el dinero habla, todos escuchan. El poco hablar es oro, el mucho hablar es lodo. La ambición del dinero hace al hombre pecador. De dinero y de bondad, quita siempre la mitad. Oros son triunfos. Vino en jarro quiero; que no me sindiquen lo que bebo. El agua para los bueyes y el vino para los reyes. Dulce y vino, borracho fino. El vino como rey y el agua como buey. El vino, poco es triaca, y mucho es veneno. Ni cena sin vino, ni olla sin tocino. Humano es el errar y divino el perdonar. Hombre que toma aguardiente y mujer que habla latín tienen mal fin. Vino, tabaco y mujer, echan el hombre a perder. El que con vino cena, con agua desayuna. Me lo trago, pero no lo mastico. Echa vino montañés, que quien buen vino bebe tiene buena mujer. Castellano fino: al pan, pan, y al vino, vino. El buen vino, en cristal fino; el peleón, en jarro o en porrón. Mala es la llaga que con vino no sana. El buen vino añejo hace al hombre niño y remoza al viejo. Bueno es el vino, cuando es del fino. Vinos y amores, los viejos son los mejores. Por San Andrés, el mosto vino es. El buen vino se ha de beber en cristal fino. El buen vinagre del buen vino sale. El vino abre el camino. Lo que escatimes a tu mujer, no lo gastes en beber. De alabar el diablo el fruto, vino Eva a probarlo. Cuando se escapó el consejo, vino el consejo. Con vino y vida tranquila, la vejez llega de maravilla. Naipes, mujeres y vino, mal camino. Jornal del obrero suele quedarse en la tienda del tabernero. Lo dice el padre Prior, vino solo hay dos: El bueno y el mejor. Cuando a la boca llega el vino, en húmedo beso tranquilo, su seda, su terciopelo y su sabroso tanino todo tu sentir entrega. Primero eres su amante, por siempre, ya, su amigo. Hasta que no pase San Germán, no digas que tienes vino ni pan. Leche y vino, veneno fino. El néctar llamado vino que en este envase oscuro se halla, bebe, disfruta y goza de él ya que el hermana. Los primeros tragos largos y los demás del mismo porte. Come carne, bebe vino y ponte gordo y si charran hazte el sordo. Vino mezclado, vino endiablado. La primera (copa) con agua, la segunda sin agua y la tercera como agua. Lo que vas a gastar en el adivino, mejor gástatelo en vino. Llámale al vino, vino, al pan, pan y todos se entenderán. Echa vino de Jerez, que si no puedo salir adelante saldré al revés. Más vale beber demasiado vino bueno que poco y malo. Vino y queso sabe a beso... Jamón, queso y vino a beso divino. Con buen vino y buena mujer nada se puede perder. Odre de buen vino y caballo saltador y hombre rifador, nunca dura mucho con su señor. El mejor vino se puede tornar vinagre. Metido en el laberinto, me da lo mismo vino blanco que tinto. Por agosto, ni es vino ni es mosto; por San Andrés, vino es. El vino de la verdad es amigo. El que vino no trae, Dios le quite el pan. Dineros en manga, tanto vino como agua. Beber es todo medida: darle alegría al corazón y sin perder la razón, darle razón a la vida. El día de San Martino (11 de Noviembre), todo mosto es buen vino. Para el vino y las mujeres, trabajamos los chóferes. Vino y pan andar te harán. Da vino por vino y pan por pan, y todos te entenderán. El bebedor fino, a sorbito bebe el vino. En vino y en moro, no pongas tu tesoro. La mujer, los olivos y el vino, mejor la del vecino. No hay loco que trague fuego, ni borracho que se desbarranque. El vino bueno y la mujer hermosa constituyen la fama de Mendoza. La buena solera hace el vino de primera. Jamón cocido en vino, hace al viejo niño. Buen vino y buena tajada y no apurarse por nada. Esta me la curo con tequila. Cena de vino, desayuno de agua. Hasta San Juan todo vino es rabadán. Ni novia sin cejas, ni boda sin quejas. Boda y cofradía, no es para cada día. En trece y martes ni te cases ni te embarques. Boda buena, boda mala, el martes en tu casa. De tales bodas, tales costras. A las romerías y a las bodas van las locas todas. Ni boda sin canto, ni muerte sin llanto. En muerte y en boda veras quien te honra. Boda y parida no es cada día. Quien bien baila, de boda en boda anda. A boda y bautizado, no vayas sin ser llamado. Boda y mortaja, del cielo baja. Boda mojada novia afortunada. Viejo que boda hace, "requiescantipace". Más vale una mala boda, que un buen entierro. Bodas buenas y magistrado, del cielo es dado. El que se enfada en la boda, la pierde toda. Boda en mayo, ¡qué fallo! A la boda del herrero, cada cual con su dinero. Boda, en igualdad, hasta en la edad. Ni fraile en boda, ni perro entre las ollas. Bodas largas, barajas nuevas. Más vale pan con amor, que gallina con dolor. Comida fría y bebida caliente, no hacen buen vientre. Tapar la nariz, y comer la perdiz. Vengas enhorabuena si traes la cena. Come pan, bebe agua y vivirás larga vida. En San Juan, las sardinas mojan el pan. A falta de pan, buenas son las tortas. Quien gasta y no gana, ¿de qué comerá mañana?. El que con vino cena, con agua desayuna. No hay olla sin ningún garbanzo negro. No me des, pero ponme en donde haya. El que de rosas de comer al burro, cobrara con un rebuzno. Donde pan comes migas quedan. El amor y el buñuelo, han de comerse en caliente. Beber y comer, son cosas que hay que hacer. A pan ajeno, navaja propia. De los olores, el pan; de los sabores, la sal. A gana de comer, no hay mal pan. No comerá mucho quien come mucho. La conciencia es un estorbo en el comercio. De limpios y tragones están llenos los panteones. Huevo de una hora; pan de un día; vino de un año; mujer de quince; amigo de treinta, y echarás bien la cuenta. Pan y vino es media vida, la candela la otra media. Quien pan menea, pan no desea. No hay bicho tan raro como el hombre avaro: para más guardar y tener, se muere por no comer. Amigo que no da pan y cuchillo que no corta, aunque se pierda no importa. El fraile que pide pan, carne come si le dan. Agua fría y pan caliente nunca hicieron buen vientre. Después que tu pan comí, te encontré en la calle y no te conocí. Todos los hijos del mismo vientre, y cada uno de su ente. Desayuna mucho, come más, cena poco y vivirás. El que le tiene miedo a los ojos, no puede comer cabeza. Estar en ayunas no mata, pero la glotonería sí. Plátano maduro no vuelve a verde. El pan de ayer y el vino de un año, a todos hace provecho y a ninguno daño. Más barato seria el pan si no comieras tanto ¡holgazán!. Quien da pan a perro ajeno, pierde pan y pierde perro. Habiendo para vino, el pan se compra. Beber y comer buen pasatiempo es. Comer ajo y beber vino, no es desatino. Comer hasta enfermar y ayunar hasta sanar. De valientes y tragones, están llenos los panteones. Lágrimas con pan, pronto se secaran. Guarda pan para mayo y hierba para tu caballo. Por la mañana oro, al mediodía plata y por la noche mata. A malas cenas y a malos almuerzos, encógense las tripas y alárganse los pescuezos. Circo y pan para la gente. Pon pan en los dientes y el hambre así se siente. Dar santo y bueno, pero del pan del ajeno. El que cuida la higuera, comerá de su fruto. Agua de mayo, pan para todo el año. El que come poco y bien, vive mucho y mejor. Agua caliente, salud para el vientre. Dame pan y llámame tonto. El pan partido Dios lo aumenta. Mano que te da de comer no has de morder. Más matan las recetas que las escopetas. Más largo que un día sin pan. Nunca vi mayor afán, que muchos hijos y poco pan. El mal de vientre no se cura con agua caliente. La peor cazuela es guisarla y no comerla. Comer con fuerza y mascar con ganas, que lo que no se hiciere hoy, ahí estará mañana. Quien poda en mayo y alza en agosto, ni coge pan ni mosto. Es bueno comer, pero no patear el pesebre. Jesús y comamos y no vengan más de los que estamos. Cenas, soles y Magdalenas, tienen las sepulturas llenas. Más vale al que Dios ayuda que al que mucho madruga. Quien busca peligro perece en él. Come poco y cena más poco; que la salud de todo el cuerpo se fragua en la oficina del estómago. Buen corazón quebranta mala ventura. Las necedades del rico por sentencias pasan en el mundo. Cuando a Roma fueres, haz como vieres. En casa llena presto se guisa la cena. El que ve la mota en el ojo ajeno, vea la viga en el suyo. Todo mal nace de la ociosidad, cuyo remedio es la ocupación honesta y continua. Más vale salto de mata que ruego de hombres buenos. Cortesías engendran cortesías. Donde menos se piensa se levanta la liebre. El hombre pone y Dios dispone. Quien a buen árbol se arrima buena sombra le cobija. Enfrenta la lengua; considera y rumia las palabras antes de que salgan de la boca. Se templado en el beber, considerando que el vino demasiado ni guarda secreto ni cumple palabra. Al buen entendedor pocas palabras. Más vale el buen nombre que las muchas riquezas. El piadoso cielo socorre en las mayores necesidades. Las iras de los amantes suelen parar en maldiciones. A buen salvo está el que repica. El dar y el tener seso ha menester. La culpa del asno no se ha de echar a la albarda. Todos los gatos son pardos. Quitada la causa se quita el pecado. Todos los duelos con pan son menos. Ándame yo caliente y ríase la gente. Querer atar las lenguas de los maldicientes es lo mismo que querer poner puertas al campo. Dar tiempo al tiempo que no se ganó Zamora en una hora. Buen servicio, mal galardón. En mucho más se ha de estimar un diente que un diamante. Promesas de enamorados son ligeras de prometer y muy pesadas de cumplir. Del hombre arraigado no te verás vengado. Suele caerse la paciencia cuando la cargan de injurias. Las gracias y los donaires no asientan sobre ingenios torpes. Tanto vales cuánto tienes. El que no madruga con el Sol no goza del día. Cada uno es artífice de su ventura. Dios ayuda al que mucho madruga. Hoy por ti, y mañana por mí. Tripas llevan pies, que no pies a las tripas. Es ligero el tiempo y no hay barranca que lo detenga. Mejor no menear el arroz aunque se pegue. La diligencia es madre de la buena ventura; y la pereza, su contraria. La codicia rompe el saco. El tiempo descubridor de todas las cosas. Nadie diga "de esta agua no beberé". Del dicho al hecho hay gran trecho. No hemos conocido el bien hasta que lo hemos perdido. Cuando Dios amanece, para todos amanece. Cuesta poco prometer lo que jamás piensan ni pueden cumplir. Más vale una "toma" que dos "te daré". Al buen pagador no le duelen prendas. A Dios rogando y con el mazo dando. Más sabe el necio en su casa que el cuerdo en la ajena. La prolijidad suele engendrar el fastidio. Por el hilo se saca el ovillo. Si da el cántaro en la piedra o la piedra en el cántaro, mal para el cántaro. Júntate a los buenos y serás uno de ellos. Vendrán por lana y volverán trasquilados. Ojos que no ven, corazón que no quiebra. Entre dos muelas cordales nunca pongas tus pulgares. A quien Dios quiere bien, la casa le sabe. Tanto se pierde por carta de más como por carta de menos. Un abismo llama a otro y un pecado a otro pecado. Para todo hay remedio, si no es para la muerte. A dineros pagados, brazos quebrados. Dádivas quebrantan peñas. No es oro todo lo que reluce. Boca sin muelas es como molino sin piedra. Ese te quiere bien que te hace llorar. Quien destaja no baraja. El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho. Váyase el muerto a la sepultura y el vivo a la hogaza. Quien da pan a perro ajeno, pierde pan y pierde perro. Caldo de parras, mejor que el de gallina y de más sustancia. A raposo durmiente, no le amanece la gallina en el vientre. Las collejas de mayo para mi caballo. Vieja gallina, hace un caldo cosa fina. Si hay trato, amigos pueden ser el perro y el gato. El perro y el niño, van donde le dan cariño. Al ojo del amo, engorda al caballo/marrano. Por San Bartolomé, brama el ciervo por primera vez. El hueso amarra al perro y el dinero a la mujer. Por Navidad cada oveja a su corral. El buey viejo bien se lame. Conejo viejo mudado de caño, no dura un año. El amor de los gatos, a voces y por los tejados. Oveja que bala pierde bocado, si comes en balde come callado. Por San Martino, mata el pobre su cochino. La zorra vieja vuélvese bermeja. En mayo, una a una lleva las cerezas el gallo; en junio, a cesto y a puño. Un grito a tiempo vale más que cien indios a caballo. Guarda pan para mayo y hierba para tu caballo. Zorra vieja no cae en la trampa. Al caballo, como al amigo, antes de necesitarlo, pruébalo. Al pan se arrima el perro. Por San Martín, deja el puerco de gruñir. Buey viejo no pisa mata, y si la pisa no la maltrata. ¿Tienes ganas de morir? Cena cordero asado y échate a dormir. Zorro viejo, huele la trampa. Las uvas están verdes, dijo la zorra cuando no las pudo alcanzar. En enero, el buey y el varón, hacen riñón. A cada puerco le llega su San Martín. La oveja y la abeja, por abril sueltan la pelleja. Lobo con piel de cordero, es que sufre la cuesta de enero. Hay veces que vale más ser gallina que gallo. Por San Bartolomé, coge el cerdo por los pies. Si quieres que el ciego cante... la gallina (el dinero) por delante. Entre bueyes no hay cornadas. Entre marido y mujer, nadie se debe meter. El cura, cuando muere un rico, mata un buen cochino. Si la perra es bola, es mejor para el perro. A pájaro viejo no le sacas las plumas. Después de Santa Andrea (30 de noviembre), toma el puerco por la sea; si no lo puedes tomar, hasta Navidad déjalo estar. Si fueres a San Javier, pasando por San Pioquinto, no enamores mujer casada ni montes caballo pinto. Hazte cordero y te comerán los lobos. Por dinero baila el perro, y por pan si se lo dan. El que da pan a perro ajeno, pierde el pan, pierde el perro y la amistad de su dueño. En Santo Domingo de la Calzada, canto la gallina después de asada. Pájaro viejo, no entra en jaula. El gato cebollero, que ni come las cebollas, ni las deja comer. Por San Matías, cantan los pájaros sus gallardías. Agosto, mes de los gatos. Zorro viejo es más astuto. El que de mozo no corre su caballo, lo corre de casado. La mujer en el amor es como la gallina, que cuando se muere el gallo a cualquier pollo se arrima. Odre de buen vino y caballo saltador y hombre rifador, nunca dura mucho con su señor. A gato viejo, ratón tierno. En diciembre, siete galgos a una liebre; y en mayo setenta liebres a un galgo. Cabrito el de marzo, cordero el de enero. El vino como rey y el agua como buey. A buey viejo no le falta garrapata. La abeja y la oveja, en abril dejan la pelleja. Para tener gustos y placeres montar en buenos caballos y enamorar bonitas mujeres. Buey viejo, asienta bien el paso. Marzo marceador por la mañana cara perro y por la tarde valiente mancebo. El buen casado es como el gallo; que llama y no pica el grano. En febrero, mes cebadero, y cabrito en caldero. Reniego de grillos, aunque sean de oro fino. A buey viejo no le cates abrigo. A cada santo se le debe una vela. A medida del santo son las cortinas. Al pasar el río: ¡ay santito mío!; pero ya pasado, santo olvidado. Bien esta San Pedro en Roma, aunque no coma. Carajadas de San Lucas, apendejadas de San Juan. Carita de santo, los hechos no tanto. Cinco de febrero, Santa Águeda todas las fiestas arrebata. Cuando la mula es mula, aunque la carguen de santos. Cuando los santos hablan, licencia de Dios tienen. De cintura para arriba todos santos, y de cintura para abajo todos diablos. De padre santo, hijo diablo. De San Pablo en adelante no hay niebla que no levante. Desnudar a un santo para vestir a otro. Después que uno está perdido no lo salvan ni los santos. El frío puede entrar de repente, entre Navidad y los Inocentes. El que de santo resbala, hasta demonio no para. El que quiera coger miel, que cate por San Miguel. El vareo de San Andrés, mucha aceituna deja caer. El veranillo por san Martín ha de venir. Entre la Santa y el santo, paredes de calicanto. Entre los santos y Navidad, ni llover no ventear. Entre Santa Ana y Santa Magdalena no tengas la parva en la era. La lluvia por San Lorenzo estropea los higos. Llegado San Mateo, siembra el tonto y el cuerdo. Llegar y besar el santo. Más vale pillar a un lobo en un rebaño que la clara conversión de San Pablo. No hay que estar muerto para ser un santo; ni amargado para ser serio. No te alabes tanto si quieres llegar a santo. Obrada de San Andrés, ni la prestes ni la des. Otoñada segura, san Francisco la procura. Para el día de san Bernabé, la siega de prados está bien. Por agosto, esconde el conejo el hopo; por San Miguel, se le vuelve a ver. Por la Virgen de agosto pintan las uvas y por San Judas, ya están maduras. Por los Santos, nieve en los cantos. Por San Andrés, el mosto, vino es. Por San Antón, gallinita pon; y por la Candelaria, la buena y la mala. Por San Antón, media hora más de sol. Por San Antón la gallina pon y si no, retortijón. Por San Antonio, el melonar, ni nacido ni por sembrar. Por San Blas, tus ajos sembraras. Por San José bendito hace la perdiz su nido. Por San Juan quemó la vieja el telar. Por San Juan, los días comienzan a acortar. Por San Vicente, helada o corriente. Por Santa Cruz la viña reluz. Por Santa Lucia, acorta la noche y alarga el día. Por Santa María de agosto repasta la vaca un poco; por la de septiembre, aunque el vaquero le pese. Por Santa Marina da una vuelta por tu viña. Por Santa Marina ve a ver tu viña, cual la hallares, tal la vendimia. Por Santiago y Santa Ana pintan las uvas y por Nuestra Señora ya están maduras. Quien se quiera matar, que coma coles por San Juan. Quien viaja en San Silvestre, en un año va y en otro vuelve. San Antón gorrinero, de los santos el primero. San Juan de los cuidados, cuando los mozos dejan a sus amos, y ellos toman nuevos criados. San Lorenzo en la parrilla y el labrador en la trilla. San Silvestre, despídete de este. Santa Rita, lo que se da no se quita. Santo que no es visto, no es venerado. Santo Tomás: una y no más. Se quedó a vestir santos. Ser pobre y rico en un día, milagro es de Santa Lotería. Si hiela por Santa Quiteria, mal año espera. Tempero de San Miguel, guárdate Dios de el. Tiempo perdido, los santos lo lloran. Vida de campo, o para tonto, o para Santo. Voy a hacer como San Blas, que comió y ya se va. A bobos y a locos no los tengas en poco. A la mujer loca, más le agrada el pandero que la toca. A quien nueve meses estuvo en la barriga de una loca, algo le toca. Al loco todos lo dejan solo. Al loco y al malo, dales la razón y quítales el palo. Al loco y al toro, dale corro. Basta un loco en una casa. Cada hombre cuerdo lleva un loco dentro. Cada loco con su tema. Cada uno lleva un loco dentro, o dormido o despierto. Cien locos conocí, todos cuerdos para no dañarse a sí. Con locos no te burles, o lo que te dijeren sufre. Cuatro locos que andan sueltos traen al mundo revuelto. De airado a loco va muy poco. De médico, poeta y loco, todos tenemos un poco. De poetas y locos todos tenemos un poco. El loco carece de juicio, el enamorado, de seso. El tiempo todo lo cura, menos vejez y locura. Fingir locura, algunas veces es cordura. Habas en flor, locos en vigor. La desgracia de un loco es dar con otro. La locura, no tiene cura; y si la tiene, poco le dura. Lo que al loco se da, perdido está. Los locos hacen la fiesta y los cuerdos gozan de ella. Los locos y los niños dicen las verdades. Mal de locura, sólo la muerte lo cura. Más sabe el loco en su casa que el cuerdo en la ajena. Ningún loco rompe a pedradas sus tejas, sino las ajenas. Obrar mucho, y hablar poco; que lo demás es de loco. Quien con locos anda cuerdo, está peor que ellos. Quien enferma de locura, tarde o nunca cura. Quitar el palo al loco, no es hacer poco. Si un loco sentado está, o los pies mueve o cantará. Un loco jamás deja la casa en paz. Un loco junto al fuego, jamás lo deja quieto. A veces, caza quien no amenaza. A veces, do cazar pensamos, cazados quedamos. Al leñador, caza, y al cazador leña. Al mejor cazador se le va una liebre. Buen cazador, mal labrador. Can de buena raza, si hoy no, mañana caza. Cazador absoluto, buenas piernas y pocos cartuchos. Cazador que tira y no persigue, poco o nada consigue. Cuando el galgo se estiraza, mal día de caza. De buena traza, buena caza. De la caza el ejercicio, bueno para diversión y malo para oficio. El amo del hurón caza por dos. El cuidado del cazador levanta la caza. El dueño del hurón caza la parte mayor. El lobo viejo caza a la espera. El mejor cazador puede ser cazado. El mejor cazador, miente más que caza. El pequeño can levanta la liebre y el grande la prende. El perro que más corre no es el que más caza. El perro que no es de raza, si no tiene hambre no caza. El que anda en silencio, cazar espera. El que sigue la caza, ése la mata. En caza y en amores, entras cuando quieres y sales cuando puedes. Es gran bobada poner cebo al ave cazada. Ese caza que no la amenaza. Gato con guantes, no caza ratones. Gato que duerme no caza ratones. Gato que mucho maúlla, poco caza. Gato que no caza ¡qué pinta en casa! Guerra, caza y amores, por un placer mil dolores. Habla de la caza y cómprala en la plaza. Ir a cazar con hurón muerto es desconcierto. Ir a cazar con hurón muerto, es mal acierto. La buena caza para la buena panza. La caza y los negocios quieren porfía. La ilusión del cazador, a una mentira otra mayor. La mujer que no sabe cocinar y la gata que no sabe cazar, poco vale. La porfía mata la caza. Mal se caza con perros desganados. Mientras unos golpean la mata, otros cogen la caza. Mochuelo a principio de cazadero, mal agüero. Ni caza de cazador, ni dinero de jugador. Ni moza de plaza, ni rico de caza. No hay caza perdida, sino la liebre asada y la perdiz cocida. No hay tal caza como con perros viejos. No vendas la piel de oso antes de haberlo cazado. Perro de buena raza, hasta la muerte caza. Quien caza sin perros, anda por los cerros. Raposa que mucho tarda, caza aguarda. Ratón que no tiene más que un horado, pronto es cazado. Reunión de cazadores, reunión de embusteros. Sed de cazador y hambre de pescador. Si cazares, no te alabes; si no cazares, no te enfades. Suele ser disparate levantar la liebre para que otro la mate. Uno caza la liebre en el prado, y otro la caza en el plato. Vale más pájaro de lugar, que águila real sin cazar. Vos cazáis y otro os caza; más valiera estar en casa. Yerro es ir de caza sin perro. Zorrilla que mucho tarda, caza aguarda. Zorro dormilón, no caza gallinas. A tu hijo, buen nombre y oficio. Al cuervo su hijo le parece un ruiseñor. Al hijo querido, el buen regalo es el castigo. Casa sin hijos, higuera sin higos. Casa sin niño es casa sin nada. Casa sin niños, tiesto sin flores. Come niño y crecerás, bebe viejo y vivirás. Como es la madre, así es la hija. Consejo de padres, guárdelo el hijo con siete llaves. Costumbres de mal maestro, sacan hijo siniestro. Cual es el padre, así los hijos salen. De buena vid planta la viña y de buena madre toma la hija. De hijos y de bienes, tu casa llenes. De padres cantores, hijos jilgueros. De tal palo tal astilla. De tus hijos solo esperes, lo que con tus padres hicieres. El hijo de la gata, ratones mata. El hijo del bueno, para malo y para bueno. El hijo del malo, ni bueno ni malo. El hijo del mendigo, poco pan y mucho trigo. El hijo que sale al padre, saca de duda a la madre. El que con niños se acuesta, cagado se levanta. El que con niños se acuesta, meado amanece. Harto es necio el que cría hijos y nieto. Hija desposada, hija enajenada. Hijo de mi hija, mi nieto ser; hijo de mi hijo, no saber. Hijo de ruin padre, apellida de su madre. Hijo eres y padre serás; cual hicieres te harán. Hijo malo, más vale doliente que sano. Hijo sin dolor, madre sin amor. Hijo, si fueres bueno, para ti planto majuelo; si malo, para ti planto. Hijos y mujer, añaden menester. La hija de la cabra, qué ha de ser sino cabrita. La hija y la heredad, para la ancianidad. Lo que con tus padres hagas con tus hijos lo pagas. Los hijos son la riqueza del pobre. Los hijos son los puntales de la casa. Los padres todo lo deben a sus hijos. Madre dispuesta, hija vaga. Madre e hija caben en una camisa, suegra y nuera ni dentro ni fuera. Madre e hija caben en una camisa; suegra y nuera ni en una talega. Madre holgazana cría hija cortesana. Nadie se huele sus "peos" ni encuentra a sus hijos feos. Padre bodeguero, hijo caballero y nieto pordiosero. Quien tiene hija soltera, no diga de la ajena. Si el hijo sale al padre, de dudas saca a la madre. Si tienes un hijo mimado, mándalo a viajar. Una hija, una maravilla. Ballestero que mal tira, presta tiene la mentira. Dar gato por liebre. El más amigo es traidor y el más verdadero miente. El mendigo es rico en mentiras. En boca del mentiroso, lo cierto se hace dudoso. En la política se ganan amigos de mentiras y enemigos de a de veras. Hábito no hace al monje. Lágrimas de cocodrilo. Los niños, ni ocultan mentiras, ni callan verdades. Mal haya el vientre que del bien recibido no le viene miente. Más vale un mentiroso, que millones de engañados. Nadie da duros a peseta. Navégase muy bien desde la cama. Para decir mentiras y comer pescado hay que tener mucho cuidado. Para mentir y comer pescado, hay que tener mucho cuidado. Refrán antiguo, mentira vieja. Refrán viejo, nunca miente. Salud y alegría, belleza cría; atavio y afeite, cuesta dinero y miente. A buen viento, mucha vela pero poca tela. A golpe de mar, pecho sereno. A la mar me voy, mis hechos dirán quién soy. A mucho viento, poca vela. A navegar el marino y a sembrar el campesino. A tal patrón, tal marinero. Abogacía: que uno boga y otro cía. Agua a la entrada de la luna, o mucha o ninguna. Al hogar, como a la nave, le conviene el mar suave. Alba roja, vela moja. Amarga más pelo de mujer que calabrote de navío. Aprovecha la racha, que viene escasa. Cada palo que aguante su vela. Carga la nao trasera si quieres que ande a la vela. Cielo rojo al amanecer, el mar se ha de mover. Con más mar, más vela. Cuando al marinero le dan de beber, o esta jodido o lo van a joder. Cuando la vela azota el palo, malo. Cuando sopla norte oscuro, quédate al abrigo de cabo seguro. De navegar apercibido, nadie se ha arrepentido. Deberás amarrar pensando que has de desamarrar. Deberás fondear pensando que has de levar. Delfines que mucho saltan, viento traen, y calma espantan. Después de perdido el barco, todos pilotos. Ea, ea, que el que no embarca no se marea. El capitán verdadero, embarca el primero y desembarca el postrero. El joven para aferrar, y el viejo para el compás. El viejo que tiene mujer moza, ojo al timón y mano a la escota. En buen tiempo, no faltan pilotos. En cada costera, mucho se espera. En calma de mar no creas, por sereno que lo veas. En lo que claramente veo, no brujuleo. En noche cerrada, más vale vela aferrada. En poca agua, poco se navega. Espera que llene la mar para entrar en la canal. Fuego fatuo y Sur soplando, va el tiempo empeorando. Gaviota que busca madriguera, anuncia tempestad de esta manera. La mar y la mujer de lejos se han de ver. La vela hay que velarla, y si no guardarla. Las estrellas a brillar, marinero a la mar. Lo que sea de la mar, todo es azar. Luna con cerca y agua en cubierta, marinero alerta. Mal hijo y buen marinero, mueren lejos. Mar rizada contra ola, al contraste el viento rola. Marzo ventoso, para el campesino provechoso y para el marino desastroso. Navío parado no gana flete. No existe hombre de mar que no se pueda ahogar. No sabe nadar el áncora y siempre va por el agua. No salgas de puerto si las nubes no corren con el viento. No tires remos viejos hasta tener dispuestos los nuevos. Norte claro, sur oscuro aguacero seguro. Norte oscuro, temporal seguro. Quien el tiempo se expone a predecir, se expone a mentir. Quien no hace nada, achica. Quien no mira derrotero, es majadero. Quien no tuviese quehacer, arme navío o tome mujer. San Telmo en cubierta brilla, cierra bien la escotilla. San Telmo en la arboladura, mal tiempo augura. Si descarga por el noreste, el capitán no se acueste. Si quieres pasar la mar, no te canses de arrizar. Si se calma el vendaval y por el norte se rola, es probable un temporal con el agua hasta la gola. Si un norte se te ha perdido por el sur anda escondido. Si vas con norte a la mar, ropa de agua has de llevar. Si viene lluvia y después viento, arría todo o métete adentro. Viento del este lluvia como peste. Zuncho flojo, peor que roto. A buen entendedor, pocas palabras basta. A palabras necias oídos sordos. Boca cerrada, más fuerte es que una muralla. Boca de verdades, cien enemistades. Cada uno habla como quien es. Del dicho al hecho hay mucho trecho. El poco hablar es oro, y el mucho es lodo. El que calla, otorga. En boca cerrada no entran moscas. En la boca del discreto lo público es secreto. Habla poco, escucha más y no errarás. Habla, no cuando quieras, sino cuando puedas. Hablando se entiende la gente. La lengua no tiene hueso, pero corta lo más grueso. Las palabras se las lleva el viento. Más apaga buena palabra que caldera de agua. Más vale un palabra a tiempo que cien a destiempo. Necio que sabe callar camino de sabio va. No hay palabra mal dicha si no fuese mal entendida. Palabras vanas, ruido de campanas. Palabras y plumas el viento las tumba. Por la boca muere el pez. Por un mal chiste un buen amigo perdiste. Quien habla lo que no debe, oye lo que no quiere. Quien habla siembra, quien oye y calla, recoge y siembra. Quien mucho habla, mucho yerra. Sabio es quien poco habla y mucho calla. Una imprudente palabra, nuestra ruina a veces labra. Una palabra deja caer una casa. Alguien ha dicho que los tontos siempre se reconocen y reúnen. Cada día tiene su refrán y su afán. Cada uno es cada uno y a todos nos gusta que nos arrasquen. Casado pero no capado. Cien refranes, cien verdades. Cuando no sepas qué hacer, un refrán te lo puede resolver. De dichos y refranes, hacemos mil planes. De refranes y cantares tiene el pueblo mil millares. De refranes y cantares: tiene el pueblo mil millares. Decir refranes es decir verdades. Decir refranes, es decir verdades. Déjate de tanto refrán, y empieza a buscar el pan. Del dicho al hecho, hay mucho trecho. El que de refranes se fía, no llega bien al mediodía. El que nunca quiere equivocarse, no hará nada jamás. La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar El que se viere solo y desfavorecido, aconséjese con los refranes antiguos. En cada refrán tienes una verdad. En las penas y afanes consulta los refranes. En tus apuros y afanes, escucha los consejos de refranes. Es verdad de verdades que para cada cosa se hicieron los refranes. Está todo dicho pero no hay nada hecho. Hablar con boca prestada, sabe bien y no cuesta nada. Hay más refranes que panes. Hombre refranero, hombre de poco dinero. Hombre refranero, medido y certero. La gracia de cada refrán, es decirlo en el momento y el lugar en donde van. La persona que es curiosa tiene un refrán para cada cosa. La persona que es curiosa tiene un refrán para cada ocasión. Los pobres tienen más coplas que ollas, y más refranes que panes. Los refranes de los viejitos, son evangelios chiquitos. Los refranes no engañan a nadie. Los refranes y las tejas son cosas de casas viejas. Mente sana, cuerpo sano. Mens sana in corpore insepulto. Mujer curiosa, tiene un refrán para cada cosa. Mujer de lengua certera, mujer refranera. Mujer refranera, o coja o puñetera. No hay mal dicho, sino malas interpretaciones. No hay refrán que no sea verdadero. Para todo mal, un refrán y para todo bien, también. Perejil en la salsa, novia en la boda y muerto en el funeral. Por no meter el dedo, metió la pata. Quien de refranes no sabe ¿Qué es lo que sabe? Quien habla por refranes es un saco de verdades. Refrán antiguo, mentira vieja. Refrán de los abuelos es probado y verdadero. Refrán de palo, refrán de fuego. Refrán es muy antiguo que es gran mal el mal vecino y más si es de tu oficio. Refrán viejo, nunca miente. Refranes no engañan a nadie. Refranes y consejos todos son buenos. Refranes y consejos, todos son buenos. Refranes y sustos, hay para todos los gustos. Reprende las vidas ajenas con buen ejemplo y no con dicho ni cuento. Saber refranes poco cuesta y mucho vale. Saber refranes, poco cuesta y mucho vale. Son los dichos y refranes bello reflejo de la sabiduría y sentir popular, expresan los sentimientos más puros y honestos de la gente que los adopta y los vuelve inmortales. A buen hambre, no hay pan malo. A pan de quince días, hambre de tres semanas. Al hijo malo, pan y palo. Amor con hambre, no dura. Boca que se abre, o quiere dormir o está muerta de hambre. Come poco, bebe el doble, duerme el triple, ríe cuatro veces y llegarás a viejo. Come y le da a uno sueño, despierta y le da a uno hambre. Con hambre hasta las tortas son buenas. Cuando el hambre entra por la puerta, el amor sale por la ventana. Cuando la boca se abre sin voluntad de su dueño es hambre, pereza, o sueño. De hambre a nadie vi morir, de mucho comer, cien mil. El comer mato a muchos, el hambre casi a ninguno. El hambre es el mejor cocinero. El hambre es muy mala consejera. Es más listo que el hambre. Hambre que espera hartura, no es hambre pura. Juventud con hambre quisiera yo, y vejez con hartura no. La ley de la oferta y la demanda resuelve el problema del precio del pan, pero no resuelve el problema del hambre. La mejor salsa es el hambre. Llueva o nieve, cuando tengas hambre, come y cuando tengas sed, bebe. Mayo hace el trigo y agosto hace el vino. Muérome de hambre, de frío y de sed: tres males tengo, ¿de cual moriré? Ni se muere la abuela, ni cenamos. No hay mejor condimento que el hambre, ni mejor almohada que el sueño. No se debe engordar la mula matando de hambre al caballo. Nunca engaña el bostezo: o es de hambre, o es de sueño. Pan para hoy, hambre para mañana. Penas, cenas y malas razones matan a los hombres. Quien de esperanzas vive, de hambre muere. Quien hambre tiene, en pan piensa. Quien no es para más, de hambre en su tierra perecerá. Tú no te apures mientras la mar tenga albures. Vino puro y ajo crudo, hacen andar al mozo agudo. Donde hay hambre, no hay pan duro. Boca que bosteza, estómago que hambrea. El que se acuesta con hambre, sueña con viandas. Entre gavilla y gavilla, hambre amarilla. Cuando el hambre da calor, la patata es un refresco. Burro que gran hambre siente, a todo le mete el diente. De que hay hambre, hasta el sancho muere. Boca que habla no morirá de hambre. Gran pena debe ser, tener hambre y ver comer. A cucharón grande pa' quitar el hambre. Agua de San Juan quita vino y no da pan. Si en julio no truena, hambre en la aldea. El hambre es lo bueno, no la comida. Nadie por hambre que tenga, se come su propia lengua. Hambre antes que hartura, no es hambre ninguna. Más vale pan duro que hambre puro. De pobres comidas y grandes cenas, están las sepulturas llenas. Me río del hambre cuando acabo de almorzar. El hambre las tumba y la vanidad las levanta. Matad el hambre, y no deis lugar, que la hartura os mate. Come poco y cena temprano, si quieres llegar a anciano. El hambre y la guerra, para verlos a cien leguas. El hambre mato a pocos; la hartura a muchos. Cuando la liaga florece, el hambre crece. Barriga llena, no cree en hambre ajena. Siembra los ajos en enero o perderás dinero. Juntarse el hambre y las ganas de comer. Come de tal manera que siempre tengas hambre. Comamos lo tuyo, bueno y santo, que de lo mío no tengo hambre. Yo que la buscaba, y ella que no se quiso esconder, se juntaron el hambre con las ganas de comer. Pon pan en los dientes y el hambre así se siente. Cuando hay hambre, no hay pan duro, ni falta salsa a ninguno. El hambre agudiza el ingenio. Cuando los elefantes luchan, quien sufre es la hierba. Mira a las estrellas, pero no te olvides de encender la lumbre en el hogar. El habla es plata; el silencio es oro. Perdonar no es olvidar, y en el perdón sin olvido sobran palabras y falta corazón. Los árboles más viejos dan los frutos más dulces. Los ojos se fían de ellos mismos, las orejas se fían de los demás. El habla es plata; el silencio es oro. Cuando otro sufre, es madera que sufre. Del árbol del silencio pende el fruto de la seguridad. No abras los labios si no estás seguro de que lo que vas a decir es más hermoso que el silencio. Luego que has soltado la palabra, ésta te domina. Pero mientras no la has soltado, eres su dominador. Los que de veras buscan a Dios, dentro de los santuarios se ahogan. Tu secreto debe pasar a formar parte de tu sangre. Si un negocio te abruma por el principio, comiénzalo por el fin. La primera vez que me engañes la culpa será tuya; la segunda vez, la culpa será mía. Quien no comprende una mirada tampoco comprenderá una larga explicación. La sabiduría no se traspasa, se aprende. "Que sabrá el chancho de aviones, si nunca miró para arriba". "Por la plata baila el mono". "Me extraña araña, que siendo mosca, no me conozca". "Dios está en todas partes pero atiende en Buenos Aires". "No por mucho madrugar se ven vacas en camison". "No hay que dar por el pito, mas de lo que el pito vale". "Menos onda que bandera de chapa". "Menos onda que pelo de indio". "Pesado como barrilete de marmol". "Pesado como collar de melones". "Pesado como vaca en brazos". "Pesado como tren a pedales". "Transpirado como testigo falso". "Preocupado como Adán en otoño". "Mas nervioso que pescado en Semana Santa". "Firme, como rulo de estatua". "Firme como mugre de talón". "Aspero como lengua de gato". "Más aburrido que chupar un clavo". "Más aburrido que bailar con la hermana". "Asqueroso como tarro de moco". "Más feo que tropezar descalzo". "Chupa como ladrillo de tercera". "Come como lima nueva". "Falso como dólar celeste". La tierra no tiene sed de la sangre de los soldados, sino del sudor de los hombres. Somos lo que hacemos, sobre todo lo que hacemos para cambiar lo que somos. Nuestros padres nos han enseñado a hablar y el mundo a callar. Nunca cagues mas de lo que comes. Norte claro, sur oscuro, aguacero seguro. Cuando bebas no manejes, se te puede dar vuelta el vaso. El hombre que no sabe sonreír, no debe abrir tienda. No desprecies a la serpiente por no tener cuernos, quizás algún día pueda reencarnarse en dragón. La verdadera sabiduría consiste en saber que se sabe lo que se sabe y saber que no se sabe lo que no se sabe. El perro en la perrera se rasca las pulgas; el perro que caza no las siente. Cuando el dinero habla, la verdad calla. Hay que subir la montaña como viejo para llegar como joven. La gente se arregla todos los días el cabello. ¿Por qué no el corazón?. Un hombre tiene la edad de la mujer a la que ama. Antes de iniciar la labor de cambiar el mundo, da tres vueltas por tu propia casa. El espíritu camina más que el corazón pero no va tan lejos. Cuando los calvos mueren, la nostalgia los convierte en cabezas rizadas. Sólo si declaras la guerra a todas las religiones, estarás en paz con Dios. El sabio no dice lo que sabe, y el necio no sabe lo que dice. La medicina sólo puede curar las enfermedades curables. Nada falta en los funerales de los ricos, salvo alguien que sienta su muerte. Ganar un proceso es adquirir una gallina y perder una vaca. Si caes siete veces, levántate ocho. Si vas a comprar no empieces por enseñar el dinero. Nunca se pierden los años que se quita una mujer, van a parar a cualquiera de sus amigas. Si te sientas en el camino, ponte de frente a lo que aun has de andar y de espaldas a lo ya andado. Si eres paciente en un momento de ira, escaparás a cien días de tristeza. Todos los hombres son sabios; unos antes, los otros, después. Disfruta hoy, es más tarde de lo que crees. Si no quieres que nadie se entere, no lo hagas. El tiempo que uno pasa riendo es tiempo que pasa con los dioses. La puerta mejor cerrada es la que puede dejarse abierta. Todos los ríos van al mar, pero el mar no se desborda . El hombre es esclavo de lo que dice y dueño de lo que calla. El que teme sufrir, sufre de temor. La lengua resiste porque es blanda; los dientes ceden porque son duros. Cada paso que da el zorro le acerca más a la peletería. El trabajo del pensamiento se parece a la perforación de un pozo: el agua es turbia al principio, más luego se clarifica. Es fácil esquivar la lanza, mas no el puñal oculto. Jamás desesperes en medio de las más sombrías aflicciones de tu vida, pues de las nubes mas negras cae un agua limpia y fecundante. Las mentes grandes discuten ideas; las medianas, cosas; y las pequeñas, personas. Puede que un hombre sea malo y buenos sus modales. Un granuja es suave como el algodón; un estúpido es duro como el hierro. Cuando de cada ocho marineros siete son timoneles, el navío termina yéndose a pique. Cuando te inunde una enorme alegría, no prometas nada a nadie. Cuando te domine un gran enojo, no contestes ninguna carta . Cuanto más grande es el caos, más cerca está la solución. Dame un pez y cenaré esta noche, enséñame a pescar y cenaré siempre. El amor es como la luna: si no crece, mengua. Muchas personas son como los relojes: indican una hora y tocan otra. Ten tu mano pronta para echarla al sombrero y tardía para meterla en el bolsillo. El pobre puede morir; lo que no puede es estar enfermo. La adulación es como la sombra; no os hace más grandes ni más pequeños. El fondo del corazón está más lejos que el fin del mundo. Vale mucho más morir intentándolo que vivir toda tu vida lamentándolo. Ninguna buena historia se gasta, por muchas veces que se cuente. Nunca permitas que tus pies vayan por delante de tus zapatos. La sonrisa cuesta menos que la electricidad y da más luz. Discreción es saber disimular lo que no se puede remediar. Las cosas bien pensadas, bien acertadas. Dime con quien andas y te diré quien eres. Los años son escobas que nos van barriendo hacia la fosa. Todos obedecen con gusto cuando el que manda es justo. Si con el pensamiento se caminara, ¡Cuantas horas contigo estará!. No por mucho madrugar, amanece más temprano. La vida tiene más imaginación de la que llevamos en nuestros sueños... A caballo regalado no le mires el dientes. El que ríe último, ríe mejor. Tres saberes gobiernan el mundo: el saber, el saber vivir y el saber hacer, pero el último ocupa a menudo el lugar de los otros dos. No hay ausente sin culpa, ni presente sin disculpa. En la paz se cuelga a los ladrones; en la guerra se les honra. Quisiera ser una lagrima, para nacer en tus ojos, vivir en tus mejillas y morir en tus labios. Al amor, como a una cerámica, cuando se rompe, aunque se reconstruya, se le conocen las cicatrices. El que nada duda, nada sabe. La vida es como un gorro; unos se lo ponen, otros se lo quitan. Más vale ser pobre que estar enterrado. Aquel que reconoce la verdad del cuerpo puede entonces conocer la verdad del universo. No hay árbol que el viento no haya sacudido. La más larga caminata comienza con un paso. Un libro es un cerebro que habla: cerrado un amigo que espera; olvidado, un alma que perdona; destruido, un corazón que llora. Todo lo que no es dado es perdido. La vida es la novia de la muerte. Siéntate en la orilla y veras pasar el cadáver de tu enemigo. El buen carpintero mide dos veces, corta una. La mitad de nuestras equivocaciones nacen de que cuando debemos pensar, sentimos, y cuando debemos sentir, pensamos. Demasiado al este es oeste. Mejor pocos truenos en la boca y más rayos en la mano. El camino hacia el cielo pasa por una tetera. Por bueno que sea un caballo, necesita espuelas. El necio dispara pronto sus dardos. Cuando se reúnen los aduladores, el demonio sale a comer. La persona que nunca comete una tontería nunca hará nada interesante. Si tu mal tiene remedio ¿Por qué te afliges?. Si no lo tiene, ¿Por qué te afliges?. Los hijos, cuando son pequeños, entontecen a los padres; cuando son mayores, los enloquecen. Es más fácil cazar moscas con miel que con vinagre. La edad de oro nunca es la presente. Cuando apuntas con un dedo, recuerda que los otros tres dedos te señanalan a ti. Mi alma a Dios, mi vida al rey, mi corazón a la dama. La sabiduría viene de escuchar; de hablar, el arrepentimiento. Cuanto más se sabe, menos se asegura. Una vez terminado el juego, el rey y el peón vuelven a la misma caja. El amor y la tos no pueden ocultarse. El amor hace pasar el tiempo; el tiempo hace pasar el amor. Quien va despacio, va seguro, quien va seguro llega lejos. El clavo que sobresale recibe un martillazo. Estudiando lo pasado, se aprende lo nuevo. Sólo en medio de la actividad desearás vivir cien años. Si no entras en la madriguera de un tigre, no puedes coger sus cachorros. Siéntate, si así quieres, sobre el corazón de un león, pero nunca sobre el de un hombre. Los puñales y las lanzas no son tan afilados como las lenguas. No importa lo el ancho y lo grueso, sino lo que dura tieso... A gallo viejo, gallina joven... La única razón para no triunfar en la vida es.. no haber nacido. El que se emperra se emperra, el que se enchila se enchila y el que se encula se chinga. Como lo de aquí para allá es subida, lo de allá para acá es bajada. A las balas no hay que tenerles miedo, hay que tenerles miedo a la velocidad con la que vienen. Ni tanto que queme al Santo, ni tanto que no lo alumbre. La fórmula del éxito es simple: haz tu mejor esfuerzo, y acaso le agrade a la gente. Si vas a morir, muere llenito. El victorioso tiene muchos amigos, el vencido buenos amigos. A gato viejo, ratón tierno. Gallinazo viejo con el ala mata. La escalera ha de barrerse empezando por arriba. Donde la pobreza entra por la puerta, el amor sale por la ventana. Saber demasiado es envejecer prematuramente. Reza, Pero no dejes de remar hacia la orilla. Añorar el pasado es correr tras el viento. Cuanto más grande la cabeza, más fuerte la jaqueca. Los jóvenes van por grupos, los adultos por parejas y los viejos van solos. Una alegría compartida se transforma en doble alegría; una pena compartida, en media pena. Los buenos recuerdos duran mucho tiempo, los malos más todavía. La edad no juega ningún papel, a no ser que se sea un queso. La palabra debe ser vestida como una diosa y elevarse como un pájaro. Cuando el carro se ha roto, muchos os dirán por dónde no se debía pasar. Ser capaz es ser útil, ser incapaz es ser algo menos. Cuando las vigas se rompen se reconstruyen; cuando los hombres mueren se les sustituye.